TRAVESIA DE TIGRE A COLONIA DEL SACRAMENTO

Hacía mucho tiempo que quería ir remando desde el Club a la ciudad de Colonia del Sacramento, entonces decidimos hacer la travesía desde el 31 de dicienbre hasta el 10 - 11 de enero aproximadamente.

Para poder salir temprano me fuí a dormir al club el 30 y a la madrugada del 31 me levanté a las 05:00 hs. para zarpar a las 06:30 hs. y evitar el calorazo del mediodía.
Junto a Osvaldo Ferrari y Ariel Vacarezza zarpamos hacia el río Paraná Miní por la ruta de los bajos del temor, primera escala hacia el hospedaje El Sol que Omar Orfao tiene en el Aº Naranjo y Paraná Guazú.
La derrota a seguir fué Gambado, Sarmiento, Canal A o Rompani, Abra Vieja, Sarmiento, canal San Antonio, Aº Dorado, Aº Arroyón, canal Honda, cruce del Paraná de Las Palmas, canal del Sueco hasta el Aº Chaná, a ésta altura ya había amanecido y el calor se estaba haciendo un poco insoportable.

A la mitad del Chaná me estaban esperando Osvaldo y Ariel e hicimos un alto para refrescarnos, luego de media hora partimos nuevamente hasta cruzar el Miní y hacer una parada para comer algo.
Media hora después zarpamos por el Aº Teyuparé- Aº Largo - cruce del Río Barca Grande - Aº Naranjo hasta el hospedaje El Sol, durante el recorrido tuvimos que hacer otra parada para refrescarnos porque el calor ya estaba haciendo estragos sobre nuestras cabezas, a pesar que teníamos gorras permanentemente humedecidas, el calor pasaba igual, por lo tanto se demoró un poco más el trayecto.
Cuando llegamos a lo de Omar nos refrescamos con una gaseosa bien fría y después de una muy corta escala seguimos viaje rumbo al ponton que P.N.A. tiene en la confluencia del Paraná Guazú con el Aº Guazú Guazucito, después se van a dar cuenta de porqué nos hubiera convenido quedarnos a pasar fin de año en lo de Omar, ni bién entramos al Paraná Guazú notamos que la superficie del agua no estaba lo tranquila que suele estar, no tardamos en darnos cuenta que ésa intranquilidad del agua era debida al viento del cuadrante Sur que estaba soplando en ése momento, al doblar la última curva del Guazú dos mil metros ántes de llegar al Aº Guazucito nos dimos cuenta que el viento había transformado la superficie del agua an una superficie movida con olas de un poco menos de un metro de altura, lo que nos obligó a navegar un poco más por la orilla para que los cambios en el bote no fueran complicados, por mirar el oleaje no nos dimos cuenta que un buque granelero de aproximadamente ciento cincuenta metros de eslora, venía remontando el Guazú, Osvaldo y Ariel le hicieron frente y se tuvo que correr, por miedo a que el Dogo de Marina le hiciera un rumbo en el casco.

Estábamos a punto de iniciar una situación Fellinezca que duraría hasta el día domingo 01 de enero de 2006, no se imaginan la cara que pusieron los oficiales de P.N.A. del pontón cuándo les comentamos que no íbamos a hacer el rol para cruzar a Carmelo sino a quedarnos a dormir ahí hasta el 01 de enero para luago seguir viaje a Conchillas, destino final Colonia del Sacramento, no les cayó demasiado bien la noticia pero nos dejaron armar nuestras carpas en la isla, al día siguiente nos hecharon a las 13:00 hs, ( hora de la famosa virazón ), lo que nos obligó después de remar 20 km. de más a estar de nuevo en el pontón y quedarnos muy a pesar de P.N.A. a dormir para así salir a las 06:00 hs. del 02 de enero, que éra lo que queríamos hacer desde el primer momento.
El día 02 zarpamos a las 06:00 hs. con viento NNE, y a las dos horas de remo ya estábamos a la altura de la isla Martín García, en ése momento los encontramos a Osvaldo y Ariel que estaban desayunando comiendo una especie de budín con pasas de uva o algo parecido, ellos iban a seguir por el canal del Infierno hacia Conchillas, pero yo preferí cambiar velocidad por conocimiento y decidí pasar cerca de punta Martín Chico, para ver mas de cerca ése lugar que es hermoso, pasé cerca de estancias, islitas paradisíacas con playas, y también cerca de restingas ( lenguas de piedra que salen por sobre la superficie del agua) , lo que hizo que me convenciera en virar hacia el canal del Infierno para zafar de la zona peligrosa.
La virada no me vino mal, por el canal podía llevar un control de la velocidad porque cómo las boyas tienen los kilómetros indicados, tomando el tiempo entre boya y boya púde calcular la velocidad del bote, que en promedio era de 7.5 km/h.
Al llegar a Conchillas apunté al muelle arenero abandonado del puerto, y luego entré a aguas tranquilas justo cuando comenzaba la virazón, al llegar a la playa no esperé que el bote tocara la arena y me zambullí desde el asiento del timonel al agua, porque el calor era sofocante.
Después de remojarme fuí en busca del camping de Copyc, que queda a las orillas del Aº Conchillas o San Francisco, lo conocíamos porque habíamos parado en ése mismo lugar cuando fuimos a Montevideo en enero de 1999, al llegar lo primero que hicimos ántes de armar las carpas fué tomar unas cervezas con asado, espléndidamente atendidos por Chichilo y Cacho,
luego de comer me fuí a descanzar.
Armamos las carpas y nos fuimos a caminar hasta el muelle arenero desde dónde se divisa en días de buena visibilidad la isla Martín García.
A la noche de ése día cenamos las deliciosas pizzas a la parrilla que hace Chichilo, y entre los cuatro nos comimos seis grandes, de todos los tipos.
A la mañana siguiente bién temprano fuimos a prefectura a hacer el rol para continuar hacia la barra del río San Juan.
Eran las 07.15 hs y yá estábamos frente al destacamento de Prefectura de Conchillas, apuntando a la Punta Pereyra yá pensando en aprovechar el buén clima para llegar a la barra del río San Juán, dónde está H. Rodriguez que al llegar remando se acordó que en enero de 1999 habíamos estado por allí rumbo a Montevideo.
H muy servicial me ofreció el baño de su casa, luego de pocos minutos, zarpamos hacia nuestro destino final de Colonia del Sacramento, realmente si no fuera por la presencia del aguerrido viento S.E. es mucho más placentero remar por el río color de león que por el delta, porque por el Río de la Plata no hay lanchas ni motos de agua.
Si el trayecto desde Conchillas hasta la barra del río San Juán es muy lindo, el de la barra hasta Colonia del Sacramento es más lindo aún, con playas de arena blanca e islotes dónde quedarse unos días descansando debe ser algo inolvidable, en una playa, pocos kilómetros ántes de las islas de Los Hornos, había una chata arenera succionando arena para llevarla hacia Tigre y utilizarla en la construcción, el silencio era tál, que se escuchaba el ronroneo del motor de la bomba chupadora de la chata, que estaba a 1.500 mts. de nuestro bote.
Las islas de Los Hornos las cruzamos cerca de la costa, y así pudimos ver hermosas residencias con vista al río, unos kilometros más adelante llegamos a las islas López del Este y del West las cruzamos también cerca de la costa, hecho que trajo una posible colición cou restos del muelle dónde bajaban los toros a la plaza de toros de Colonia del Sacramento.